¿Realmente necesito un psicólogo… o necesito a Dios?
- Ale Diener

- 10 jul
- 1 Min. de lectura
Como orientadora familiar, me preocupa profundamente una tendencia que cada vez se vuelve más común: frente a cualquier ansiedad, tristeza o sensación de vacío, corremos de inmediato al psicólogo esperando que alguien “nos arregle”. Y no es que la ayuda profesional no tenga su lugar —claro que lo tiene—, pero no todo dolor necesita un diagnóstico clínico, ni todo vacío se llena con técnicas terapéuticas.
Vivimos en una cultura de inmediatez. Queremos respuestas ya, soluciones rápidas, alivio exprés. Pero el alma humana no funciona así. Nuestro corazón, herido muchas veces por el ritmo vertiginoso de la vida, no se sana solo con palabras, sino con presencia. Y esa presencia es la de Dios.
La paz interior no se compra ni se receta: se construye. Y empieza por detenernos, hacer introspección y permitirnos mirar hacia lo alto. Porque es ahí, en el silencio de la oración, en el consuelo de los sacramentos y en la escucha atenta de la Palabra, donde encontramos lo que verdaderamente necesitamos.
¿Y si en vez de buscar que alguien más nos diga quiénes somos, se lo preguntamos a Aquél que nos creó?
Por eso, hoy quiero invitarte a vivir una experiencia distinta: un retiro espiritual profundamente católico que nos recuerda quiénes somos y a qué hemos sido llamados. “ID, recuerda quién eres” se llevará a cabo del 12 al 14 de septiembre en la Hacienda Wakax, Tulum, un entorno natural privilegiado para reencontrarte con Dios y contigo mismo.
Un espacio para sanar el espíritu, renovar tu identidad y aprender a vivir en paz, no desde lo inmediato, sino desde lo eterno.
Contacto: Mariana Ibarra +52 984 247 0039




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